Caridad.

Dices tener el poder de santificarme o destruirme. Y me destruyes; ahora sé que sólo tenías el poder de destruirme.

7 comentarios:

  1. Nadie tiene el poder de santificarnos, Ignacio.
    Lo bueno que habita en nosotros, proviene de nosotros mismos.

    Parece extraído del Viejo Testamento,me hiciste dudar...

    Beso enorme

    SIL

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  2. (lástima que quedó el comentario de Sil a la vista, porque la idea es similar)

    Cada uno es dueño de su destino, así que si estás destruido..., ha sido obra tuya y tú eras el que tenía el poder de cambiarlo.

    Un besote gigante, gigante, Ignacio.

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  3. Por un momento me pareció que te referías a la Iglesia católica, apostólica y romana.

    Un abrazo
    LUIS

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  4. Aca estan todos diciendo "no te pueden santificar", yo te lo aseguro,

    No te pueden destruir.

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  5. Y si... hay gente que solo tiene esa tarea. Otros la de ignorar,subestimando al resto. En fin... hay de todo.

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  6. Es importante la caridad en silencio y sin testigos. Entre el corazón y su dueño. Un abrazo.

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  7. Creo que interpretáis mal esta sentencia de Ignacio. El error se origina al centrarse en "el destruído" en lugar de hacerlo en "el que destruye".
    Cuando de entre las dos opciones posibles de que alguien nos "respete y nos valore" (nos santifique) o, por el contrario, que alguien nos "humille e infravalore" (nos destruya), ese alguien elige la segunda, esto es porque realmente éste nunca tuvo acceso a la primera.
    El que conoce "íntimamente" la Caridad como manifestación del Amor que es Uno Mismo vertiéndose en Todo, ya no tiene elección pues tan sólo hay una elección posible: La de que Todo es Uno y que Uno está en Todo. Por tanto, desde esta Realidad dañar al otro es dañarse a Uno Mismo.
    Por esto San Agustín dijo: "AMA, y haz lo que quieras". Porque cuando se actúa desde el Amor que somos en el más profundo centro ya no hay lugar para el daño en cualquiera de nuestras acciones.
    Y cuando nuestras acciones están impregnadas de daño que vertemos hacia afuera es porque no hemos realizado aún en nuestro interior ese Amor que somos realmente y que se manifiesta allá a donde miremos como una extensión de Uno Mismo, en donde finalmente el daño se disipa y sólo la Caridad se revela como expresión del Amor hacia el Todo que somos.
    Y si tampoco fuera esto, que Ignacio nos lo aclare... ; )

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