A veces me siento bastante ignorante en relacion a otros... y es lo cierto... lo admito y no me averguenzo por ello... pero se que al saber de mi ignorancia puedo llegar a aprender de otros... eso es bueno... Asi que mientras tanto... es cierto, me siento una pequeñita leona de ese circo... Mil besos again!!!
...nada, Ignacio; que leyendo tu frase creo que acabo de entrar al circo y aun no me he dado cuenta que soy el león. Sos genial!!! besos gigantes, no me olvido de ellos ;)
Lo único que se me ocurre pensar es que el León aunque parezca imposible siempre tiene una oportunidad y te lo digo desde el lugar de alguien que trabajó parte de su vida en un circo...
Te perdí el rastro Ignacio! Estuve casi mes y medio de vacaciones, dando vueltas por algunos lugares alucinantes. Y volví, acá estoy. Siguiendote, metiendo la cabeza en los leones.
Ciertamente a veces no sabemos que simplemente somos meros elementos de un espectáculo. A menudo me siento como un titere en manos de algo que llamamos vida...
A pesar de no entender la conexión con el título, esta la encontré la más cierta de todas. Quizás no por su veracidad en sí, si no por la facilidad con que la encontramos en nuestro diario vivir.
A veces me siento bastante ignorante en relacion a otros... y es lo cierto... lo admito y no me averguenzo por ello... pero se que al saber de mi ignorancia puedo llegar a aprender de otros... eso es bueno...
ResponderEliminarAsi que mientras tanto... es cierto, me siento una pequeñita leona de ese circo...
Mil besos again!!!
...nada, Ignacio; que leyendo tu frase creo que acabo de entrar al circo y aun no me he dado cuenta que soy el león.
ResponderEliminarSos genial!!!
besos gigantes, no me olvido de ellos ;)
O comida, o comida
ResponderEliminarVaya moraleja, y tan cierta
ResponderEliminardejas mucho que reflexionar en cada blog tuyo,
abrazos
Lo único que se me ocurre pensar es que el León aunque parezca imposible siempre tiene una oportunidad y te lo digo desde el lugar de alguien que trabajó parte de su vida en un circo...
ResponderEliminarno quiero entrar.
ResponderEliminarExactamente, como el show de Tinelli.
ResponderEliminarTe perdí el rastro Ignacio!
ResponderEliminarEstuve casi mes y medio de vacaciones, dando vueltas por algunos lugares alucinantes. Y volví, acá estoy. Siguiendote, metiendo la cabeza en los leones.
Besos.
perfectooo
ResponderEliminarjajaja. Muy, pero muy bueno... Sorprendes con tu imaginacion de leon en el circo de las palabras
ResponderEliminarDruida.
Excelente Ignacio. Qué fiel reflejo de ciertos espacios sociales que hiciste con tu analogía de la carpa de circo. Me encantó.
ResponderEliminarCariños!
Ciertamente a veces no sabemos que simplemente somos meros elementos de un espectáculo. A menudo me siento como un titere en manos de algo que llamamos vida...
ResponderEliminarEsa coma también sobra.
ResponderEliminarA pesar de no entender la conexión con el título, esta la encontré la más cierta de todas. Quizás no por su veracidad en sí, si no por la facilidad con que la encontramos en nuestro diario vivir.
ResponderEliminarSaludos.
sin embargo a veces la ignorancia hace feliz.
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