Para mí, la objetividad no existe. Se puede "pretender" pero...todos somos sujetos y tenemos nuestra percepción y apreciación del mundo.
El cuerpo, ya sea de un hombre o una mujer, nunca puede acercarse siquiera a la palabra "objeto". Por más adjetivos que eliminemos ese cuerpo jamás llegará a ser una simple cosa que se usa y ya está.
Tengo cosas como las que publicás acá -conceptos, definiciones, "mi diccionario"- y las voy a tener que subir, me siento influenciada jaj. Me gustó mucho éste blog y leí un par de cuentos también.
Corto, directo y acertado. Como siempre. Querido Ignacio... Hubieras publicado los insultos de aquella gente indeseable. Así es como se les muestra sin máscaras... Un beso enorme, corazón...
Ojalá algunos te leyeran ;)
ResponderEliminarUn besico.
Exacto. Pero la inversa no es correcta. Si miras un objeto es posible que veas el cuerpo de una mujer (me pasa todos los dias jajaja)
ResponderEliminarsaludos
Druida,
Que hermosas somos las mujeres. Sí.
ResponderEliminarSubjetivamente a veces puedo sentirme como una guitarra.
ResponderEliminarMuy ingenioso...
ResponderEliminarUn placer leerte.
Saludos.
Me gusta... y como mujer me siento incluso alagada...Gracias por tu comentario y cuidate mucho.
ResponderEliminarEl cuerpo de una mujer, siempre, pero siempre, es hermoso.
ResponderEliminar...es que no lo somos...
ResponderEliminarAl margen del juego con la familia de palabras- que me fascina-
ResponderEliminarhas enaltecido otra vez nuestro género, Ignacio.
Sos un Caballero de la C a la o, indiscutiblemente.
Un beso enorme.
SIL
Para mí, la objetividad no existe. Se puede "pretender" pero...todos somos sujetos y tenemos nuestra percepción y apreciación del mundo.
ResponderEliminarEl cuerpo, ya sea de un hombre o una mujer, nunca puede acercarse siquiera a la palabra "objeto". Por más adjetivos que eliminemos ese cuerpo jamás llegará a ser una simple cosa que se usa y ya está.
Una frase muy buena que da para pensar bastante.
Beso!
Sí, más lo son...
ResponderEliminarTengo cosas como las que publicás acá -conceptos, definiciones, "mi diccionario"- y las voy a tener que subir, me siento influenciada jaj.
Me gustó mucho éste blog y leí un par de cuentos también.
Un beso a vos.
mina
Corto, directo y acertado. Como siempre. Querido Ignacio... Hubieras publicado los insultos de aquella gente indeseable. Así es como se les muestra sin máscaras...
ResponderEliminarUn beso enorme, corazón...
Ahh.. que bellas palabras...
ResponderEliminarUn abrazo
Es un honor para el genero femenino que piense asi...
ResponderEliminarMil gracias... aunque a veces nos sentimos como objetos...
Besos cielo, llenos de luz para ti!!!
Tiene razón el título de la entrada: confusión, solo confusión.
ResponderEliminarUn saludo.
Jo¡¡
ResponderEliminarSi eso lo pensaran todos los hombres, cambiarían mucho las cosas...
Tremenda conclusión.
Y objetiva.
Gracias Ignacio.
Mil besos objetivos
"Me encata oirte decir eso"
ResponderEliminarHacía mucho q no m pasaba...ya era hora!!! :)
~super
ResponderEliminarme gusto tu particular ideología,
saludos
:D!
Algunos ven un objeto y a su corazón un instrumento...un placer leer tu aforismo y encontrar en él lo que a muchos falta...
ResponderEliminarCuanta verdad hay en esa frase Ignacio
ResponderEliminarPero hay que saber..y querer mirar
Besos
No objetiva ni subjetivamente, no hay duda de que no
ResponderEliminar¿Por qué tiene que pasar sólo por el cuerpo? ¿No se puede ver más allá?
ResponderEliminarDigo, nomás :)
Besos
El mundo gira alrededor de las mujeres!!
ResponderEliminarA no ser que hablemos psicoanaliticamente :) (en términos de objetos de amor) ¡No es despectivo!
ResponderEliminarPero entendí que ese no es el trasfondo de la frase y me pareció hermosa :)